El Gobierno Vasco asegura que esta cuantía busca "contribuir al sostenimiento económico de los mismos y a la lucha contra la desinformación". Sin embargo, el reparto premia especialmente a los medios en crisis, altera la libre competencia del sector de los medios de comunicación y crea una dependencia clara con el poder. 

Cabe destacar que la gran mayoría de las ayudas se han repartido entre los medios vinculados o relacionados con el Gobierno liderado por el Partido Nacionalista Vasco (PNV). Es así como los dos principales diarios del grupo Vocento  han recibido el 44% de las ayudas, con 1.783.281 euros para El Correo y otros 876.160 euros para El Diario Vasco. Deia, recibió 547.987 euros. Tenemos que tener en cuenta que varios medios de comunicación siempre han estado influenciados por ciertos partidos políticos.

Gara recibió 547.978 euros. Entre las fundadoras de este diario encontramos a Mertxe Aizpurua, actual diputada por Guipúzcoa y portavoz de Bildu en el Congreso. Del mismo modo, Berria, periódico cercano a la ideología nacionalista, recibió 287.925 euros y Radio Nervión se quedó con 278.637 euros. Este último es un grupo empresarial con sesgo del Partido Socialista de Euskadi (PSE).

Cierra el top 10 de los medios con mayores ayudas Noticias de Gipuzkoa con 182.662 euros, grupo empresarial cercano también al PNV. Los medios de difusión nacional que recibieron ayudas fueron Cadena Ser con 643.962 euros, Cope con 201.238, Onda Cero con 142.414 y Eldiario.es con 133.126 euros. Y fueron rechazadas las solicitudes de una docena de medios entre los que se encuentran Crónica Vasca, Dato Económico, Digital Nortexpres o Komunikazio Biziagoa.

Una sociedad es más libre cuando hay auténtica libertad de prensa, pero hoy en día los medios siguen acosados por quienes quieren manipularla en todo el mundo. El control político de los medios de comunicación, enseña que el poder todo lo puede comprar y el interés económico de los diarios en papel y las cadenas de televisión ha supuesto ceder al chantaje. La corrupción es peor cuando se trata de un medio público, pues con el dinero de todos no se puede favorecer la política partidista del Gobierno de turno. Un medio de comunicación tiene más fácil ser libre cuando lo financian los particulares que acceden a sus contenidos. Lamentablemente, hay pocas personas dispuestas a pagar el esfuerzo de tantos periodistas.

Cuantía concedida por cada medio de comunicación: